
Absolutamente nada distinto sucedió al principio.
Las personas seguían en sus limitadas rutinas de vida.
Seguían dirigiéndose a sus trabajos, algunos, seguían robando, cometiendo el mal. Otros seguían padeciendo en sus propios infiernos. Otros seguían disfrutando.
La mayoría continuaba adorando a sus acostumbrados dioses y demonios...
Nada más ocurría.
La verdad me sentí algo decepcionado.
Habría podido vivir con esa decepción. Bueno, creo que todo el mundo habría podido vivir con esa decepción en particular.
Los días sucesivos fueron algo, distintos.
Los animales fueron los primeros en notar... "El cambio".
Se tornaron agresivos al hombre y entre ellos. Estaban nerviosos.
Luego de los dos primeros días, ya no existía el concepto de "Mejor amigo del hombre". Me alegre de ver como todos se desesperaban y como sufrían a manos de las especies "menores".
Confieso que aun que sé que eso esta mal, no puedo evitar el disfrutarlo, lo siento pero realmente no puedo.
Al cuatro día, los insectos se sumaban a la "Ola de nerviosismo". Las abejas atacaban sin razón a algunas personas en el campo así como a otros animales, les picaban sin importar el desprenderse de sus interiores al dejar los aguijones en sus víctimas.
Ya a esas alturas en las ciudades habían verdaderas montañas de cadáveres de gatos y perros. Las calles completas hedían a su carne quemada. La gente ya no estaba tan tranquila en sus acostumbradas rutinas como antes.
Ya muchos no se dirigían a sus empleos. Los saqueos y asesinatos comenzaban a aumentar. Las deidades comenzaban ya a no escuchar ninguna suplica... o realmente la gente gritaba y lloraba más de lo que rezaba. Creo que siempre ha sido así, solo que en tiempos de crisis las cosas tienden a acentuarse.
Al quinto día el hombre, abandonado por Dios, decide abandonar completamente a la moralidad.
Violaciones en masa. A niveles Inter-Raciales, ultrajes vengativos a nivel de clase social, e incluso a niveles consanguíneos. Es como si la especie hiciese un intento ultimo e inútil por perpetuarse, incluso en su mismo lecho de muerte.
Las autoridades intentan aplacar esta ola de violencia sexual... Su impotencia es lamentable.
Durante años completos me obsesioné con el posible fin de nuestra raza. Miles de obras, mitos, teosofías, cantares y registros místicos cantaban sobre los días en que abrimos por primera vez los ojos al mundo.
Es una ley el que tendría que llegar el momento en que cerrásemos los ojos definitivamente como especie. Y habría también alguien que debería registrar dicho momento.
Tuve la fortuna de contar con los recursos y los medios para poder dedicarme a la investigación de esta pasión tan poco comprendida. De poder viajar a hablar con eruditos y entendidos en la materia, así como con viejos sabios locos de la tierra. En excavar ilícitamente, e incluso introducirme al fino arte de compra de objetos arqueológicos robados.
Por supuesto, nada de eso sirvió en demasía.
Pero el destino era amable conmigo, y puso en mi camino cuando visitaba la ciudad del Cairo al viejo Gelel Ben-Zahar, un errante conocedor de viejos misterios, según el. Un loco y estafador según mis amigos. La verdad me importó poco si era lo uno o lo otro, yo ansiaba conocer, saber... Había gastado todo cuanto poseía en pos al conocimiento, había dejado atrás a mi familia y a la mujer que amaba, pues a nada amaba mas que a mi saber. Le di mil dólares al viejo y le pedí me llevase donde la verdad de nuestro fin permanecía por las eras sepultada.
Me dijo que le esperara al amanecer en Giza. Pensé en la estupidez que había hecho de confiar mi dinero a ese hombre. Pero a la madrugada siguiente, el sol no acababa de salir, y ahí estaba.
No se por cuanto viajamos, en el viaje me enfermé, los delirios de la fiebre se apoderaron de mi, y de no ser por el viejo me hubiesen arrastrado a la oscuridad de la muerte como harpías sangrientas.
"Pediste ver y has de ver", Me dijo el viejo. Me cuidó, y en un par de días y noches me curó.
Entonces, una noche llegamos a lo que me señaló era el conflictivo país de Irak, y tras dejar los camellos para continuar a pie, por escombros y ruinas antiguas sin forma en esa oscura noche de luna menguante, llegamos a una especie de entrada a una caverna subterránea perteneciente a lo que el antiguo pueblo de observadores llamaba Eridú.
Y descendimos.
Todo cuanto vi y no vi en esas profundidades haría palidecer la ilustración más torcida de Blake, el diseño más perverso de Giger, así como el relato mas alocado de las mentes de los mismos Lovecraft y Bloch.
Posiblemente llenarían paginas completas, pero no creo ser capaz de recrearlas, y aun que pudiese, me pregunto si viviré para hacerlo.
Solo diré que se me reveló información, alegorías en su mayoría. Y mediante profundo estudio y meditación vi lo simple de nuestro Grand Finale. El "SIETE" de nuestra amada Biblia Judeo-Cristiana ("En siete días Dios creó el Mundo") se repite tanto en los sombríos criptogramas del Enuma Elish Como en el Popol Vuh, pasando por todos los registros sagrados,el de la Toráh, El Zoroastro y el Corán. Grabados Persas y Acadios lo dicen: "Si algo nace por una gota de agua, algo morirá por una gota de agua".Como es arriba es abajo, como es abajo es arriba, tal como los principios del hermetismo. Luego dice "El Gran Marduk Nibiru recogerá lo que le sea de valía".
Espero ser digno.
El sexto día, la gente ha perdido completamente el control de sus emociones e impulsos básicos, se asesinan y devoran entre si en oleadas de horror e ira. Parecen animales salvajes famélicos, como dominados por una lombriz solitaria de la locura en sus vientres.
Desde la azotea de un alto edificio les observo mientras otras personas junto a mi me gritan para que deje de escribir y les ayude a trancar las salidas del edificio hacia el lugar donde estamos. Los ignoro, se que no servirá de nada.
Diviso una extraña luz en el cielo al poniente, del tamaño de Venus, no la había notado antes. Pero no corresponde a ninguno de nuestros astros.
La registro quizá como prodigio de una inevitable alteración de mis sentidos en estos momentos de horripilante belleza.
"El Sexto día Dios Creó al hombre".
Recuerdo Eso y no puedo evitar reír.
Faltan dos minutos para la media noche del 30 de Diciembre del 2012, la luz que era del tamaño de Venus ahora se asemeja a un pequeño sol. Noto leves temblores en la estructura...
Mis compañero comienzan a enloquecer también como los otros.
Espero ser digno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario